martes, 26 de octubre de 2010

¿Cuelgo las ideas en la percha?

   Sí, al entrar en mi consulta. ¿Las dejo con el abrigo? Mi rechazo a las novedades en materia de anticoncepción, prejuicios raciales, recomendaciones en toxicómanos, atención a la tercera edad si ya están al final, extranjeros "go home", políticos del otro lado... ¿Les atiendo por si acaso? ¿Es el miedo un criterio adecuado en la atención sanitaria?
   Somos personas, no robots, y por tanto tenemos sentimientos de rechazo, cariño, asco, odio, y hemos de llevarlos hasta nuestro trabajo sanitario. ¿Pero, una vez allí, dónde los dejamos?
   ¿Debería haber hecho un MIR de laboratorio?

  

4 comentarios:

  1. Hola José.

    Gracias por tu link en Matasanos.
    Veo que recien empiezas en esto del blogueo, estas invitadisimo a participar del proyecto que tenemos en Matasanos, si te parece. Somos creyentes que potenciar un proyecto en conjunto genera más impacto que hacerlo por cuenta propia, por eso te dejamos la puerta abierta si asi lo deseas.
    Puedes escribirnos a contacto arroba matasanos . org

    Muchos saludos
    Luis Avila
    aka @artangelo

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  2. Muchas gracias por el ofrecimiento y por supuesto que intentaré colaborar, si tengo algo que decir, en vuestro espacio.

    Un saludo.

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  3. Yo soy médico, no sé nada de derecho, si de sentido común y en mis 20 años de ejercicio profesional, dejo en la percha el problema personal, cuando tengo al paciente delante, sólo veo paciente, asi creo que sucede a la mayoría de mis compañeros, estudiar medicina te va cambiando poquito a poco y no entras en quirófano si no vas a dar todo por tu paciente,

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  4. Y así debe ser. El ser humano es igual cualquiera que sea su religión, edad, raza, sexo, creencia, opinión, etc, etc.
    Eso sí, ayuda mucho que estén dormidos. Yo recuerdo que en tiempos sólo quería ser intensivista o cirujano.

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